El delegado de Cooperación al Desarrollo se ha reunido con Gaici Nah, experto en minas antipersona del Sáhara Occidental
El diputado ha mostrado su apoyo y solidaridad al pueblo saharaui, que está expuesto a este tipo de minas, que son un muro contra la paz y se ha cobrado la vida de más de 2.500 saharauis”.
Gaici ha señalado que “hay familias que nunca se han visto desde la invasión marroquí y la construcción de este muro”. Además ha manifestado que “en muchos casos dificulta que los niños lleguen a escuelas e impide que los enfermos traspasen el muro para recibir atención médica, mientras que el ejército marroquí lo usa como corredor para la inmigración ilegal y el tráfico de drogas”.
“Todo ello suma a la población saharaui en una gran desmotivación social. Es la prisión al aire libre más grande del mundo, porque encierra herméticamente a un pueblo entero”, ha añadido.
La ONU actuaba en la zona y ayudaba al pueblo saharaui a librarse de las amenazas de las minas antipersona pero, según ha expuesto Nah, “esta ayuda se acabará y eso supone un agravio para todos los saharauis”.